¿Tener múltiples es causa de divorcio?
¿Te sorprende saber que la tasa de divorcios es mayor entre los padres de múltiples?
Recuerdo que durante mi proceso de FIV, justo el día que me transfirieron mis pequeños blastocitos, me entregaron en el despacho de una de las embriólogas un folleto sobre los riesgos del embarazo múltiple, supongo que con la esperanza de que desistiera de la idea de ponerme dos embriones.
Esperaba encontrar un folleto que hablase sobre los riesgos médicos del embarazo múltiple, los riesgos de la prematuridad para los bebés y ese tipo de cosas. Y aunque también se trataban esos temas, cuál fue mi sorpresa cuando ví una sección que hablaba acerca del riesgo de divorcio y los problemas económicos. Son los otros riesgos del embarazo múltiple.
En este artículo hablaremos sobre la tasa de divorcio entre los padres de múltiples y conoceremos la historia de dos mujeres cuya maternidad múltiple puso en jaque su matrimonio, una de las cuales no duda en señalar directamente a sus trillizos como causantes directos de la ruptura de su matrimonio.
La tasa de divorcio entre los padres de múltiples
Al contrario de lo que pudiera pensarse, aunque es cierto que la tasa de divorcios es más alta, apenas sobrepasa a los padres de un embarazo único en un 4%. O sea que los padres de gemelos, mellizos y trillizos tienden a divorciarse más que los demás, pero sólo un poco más. Supongo que parcialmente es un consuelo.
He tratado de documentarme sobre este tema y lo curioso es que todos los artículos y estudios que hablan sobre la tasa de divorcio en padres de múltiples acaban aludiendo al tema financiero, como si la presión monetaria y el divorcio estuviesen indisolublemente unidos.
En cualquier caso, aquí están los pocos datos que he podido encontrar. Según un estudio realizado por la Universidad de Birmingham:
- El 28% de los padres de múltiples acaba divorciándose, frente a un promedio del 24% en la población general.
- Dos tercios de los padres de múltiples confesaban estar peor que antes de tener a los bebés, frente a un 40% de la población general.
- Las madres de múltiples tienen un 20% de probabilidades de no reincorporarse al trabajo después de la maternidad.
- Casi un 48% de las familias múltiples se había visto obligada a utilizar el dinero de sus ahorros para pagar los gastos, frente al 37% general.
Otro estudio realizado por el Hospital General de Masachussets (Boston) apunta a que el 13% de las mujeres cuyo hijo mayor no era múltiple estaban divorciadas, frente a un 14% de las mujeres que tuvieron múltiples en su primer embarazo. Además hallaron que las madres de gemelos con un nivel educativo más bajo tenían más probabilidades de divorciarse.
Lo más interesante de este estudio es que apunta directamente a dos factores de riesgo concretos para el matrimonio: La edad de los gemelos y el sexo de los mismos. Así, a mayor edad de los gemelos se iba incrementando el riesgo de divorcio, que aún se incrementaba más si entre los gemelos había alguno de sexo femenino. Parece ser que la razón es que es más caro criar a una niña que a un niño. Además afirman que el impacto psicológico del divorcio en el menor es mayor en el caso de los niños.
Por su parte, la doctora Elizabeth Damato, que dirige estudios con gemelos en la Universidad de Cleveland, afirma que los padres se sienten estresados porque pasan tanto tiempo atendiendo a las necesidades de sus hijos que no tienen tiempo de disfrutarlos realmente. Asimismo, apunta al estrés y la falta de sueño como dos factores que pueden contribuir directamente a la tasa de divorcio.
Según Laura Pérgola, fundadora de la asociación argentina Multifamilias y madre de quintillizos, “El agotamiento, la tensión y las preocupaciones por el presente y por el futuro crean el terreno ideal para las crisis de pareja. La mayoría de las parejas que tuvieron ‘súper múltiples’ actualmente están separadas. Los múltiples son muchas personas que tienen las mismas necesidades al mismo tiempo.”
Por ponerle una nota positiva al asunto, no puedo dejar de comentar este otro estudio que afirma que las personas que tienen hermanos tienen menos probabilidad de divorciarse en la edad adulta, descendiendo el riesgo en un 2% con cada hermano que uno tenga. O sea que al menos nuestros hijos sí tienen menos probabilidades de divorciarse, algo bueno tenía que tener ser múltiple.
Algunos testimonios
A continuación os dejo con la traducción de dos testimonios muy interesantes que he encontrado publicados. Uno de una madre de gemelas y otro es de una madre de trillizos. Los reproduzco por ser casos bastante representativos de todo lo que ya hemos comentado. Una de ellas consiguió salvar su matrimonio y la otra no.
El divorcio después de tener gemelos
Mirando hacia atrás, puedo ver que estaba llena de un optimismo ciego, como si solamente el tener fuerza de voluntad pudiera rescatarnos y devolvernos la cordura. Nunca imaginé ni una sola vez que seríamos presa de ese lento e inexorable golpe; Meses de privación del sueño, unos gemelos nacidos en la cúspide de una recesión económica devastadora, la presión de criar cinco hijos con un solo sueldo (…).
Creo que simplemente nunca imaginé que el divorcio fuera algo que pudiera pasarnos a nosotros. Que, de alguna manera, éramos distintos. Nos sobrepodríamos. (…)
“Los gemelos son ahora quienes dirigirán el espectáculo”, nos dijo el Nenatólogo mientras mis hijos estaban aún en la UCIN. Lo dijo divertido, riéndose entre dientes. Recuerdo haber pensado: “Ya soy madre de tres, ¿Cuánto más intenso puede ser realmente?” Respuesta: Mucho más intenso.
Ya había oído anécdotas y horribles historias de terror acerca de matrimonios rotos cinco años después de haber tenido múltiples. Cuatro años después de que hubieran nacido mis hijos, de repente lo entendí todo.
El verano pasado le pedí a mi marido que se mudara. Estaba exhausta. Estábamos ambos exhaustos. Quemados. Yo ya no tenía la suficiente voluntad para seguir. El reto prolongado de criar gemelos había acentuado todos nuestros conflictos y desacuerdos. En ese momento no veía otra opción más que dejarle.
“Pero el mayor acto de coraje es querer a alguien”. Oí esa frase en una obra de teatro a la que acudí una noche. Algo en esa línea se metió dentro de mi alma. La obra iba acerca de la historia de una madre de familia embarazada de gemelos cuyo marido ya no podía resistir más el peso de su vida. Así que un día desapareció.(…)
Y, como pasa con el buen arte, esta obra me devolvió el reflejo de cómo era la vida para mí. Me inspiró. Me ayudó a recordar. El mayor acto de coraje es querer a alguien.
Mi marido y yo seguimos juntos. Ahora estamos juntos. El verano pasado fue el momento más bajo de la caída pero se está produciendo una larga y lenta recuperación. Pero es una recuperación.
Vivimos esos momentos diarios de forma consciente, conviviendo con el dolor, afrontando el dolor en vez de buscar una escapatoria. (…) Cada día es una oportunidad para vivir con coraje.”
Fuente: Divorce after twins. El blog de Elizabeth Esther.
“Los adoramos pero la cruda realidad es que mis trillizos destruyeron mi matrimonio»
Bernardette y sus trillizos de 4 años
El sol brillaba. Los compradores entraban y salían del supermercado. En el bar, las madres disfrutaban de un café mientras sus retoños jugaban felices.
Fuera, en el parking, se encontraba Bernardette Lowe, madre de trillizos de 18 meses, con las lágrimas resbalando por sus mejillas. A sus pies, un carrito de bebé del tamaño de un mamut roto y descompuesto. Las bolsas con la compra estaban desperdigadas a su alrededor y los tres bebés estaban llorando al unísono.
“Me llevé a los bebés en su carrito triple para hacer la compra semanal y en ese momento estaba andando hacia casa” dice Bernardette, de 35 años. «No podía usar el carro del supermercado porque no tiene tres asientos, así que fui metiendo la compra en el carrito de bebé. Con los tres bebés y la compra el carro pesaba una tonelada. Era como empujar un tractor cuesta arriba. Pero lo hacía cada semana.» (…)
«Me podía haber llevado un bebé a casa, ¿Pero los tres? Sin asientos de coche para bebés no podría usar un taxi. Estaba totalmente indefensa y mi marido tuvo que dejar el trabajo para ir a recogerme.»
«Si tener un bebé pone a la pareja bajo presión, imagínate el poder de tres…»
Ahora, a la edad de cuatro años, con mechas rubias en el pelo y unos ojos azules gigantes, Max y sus hermanas gemelas idénticas Brook y Keira son encantadores y muy queridos por sus padres. Pero la verdad es que estos tres bebés tan deseados destruyeron el matrimonio de sus padres. Bernardette y Chris se separaron hace dos años y ahora están esperando el divorcio.
«Nunca nos imaginamos ni por un segundo la dureza de tener que criar tres hijos a la vez», dice Bernardette. «Pensábamos que estábamos preparados como familia. Y de hecho hemos acabado perdiendo todo lo que teníamos, incluido nuestro matrimonio».
«La presión emocional y financiera era excesiva. No puedo llegar a describir el nivel de cansancio y el desgaste psicológico que conlleva cuidar a tres bebés, incluso dejando aparte el tema del dinero.»
«Quiero a mis hijos pero creo que sí sólo hubiéramos tenido un bebé Chris y yo seguiríamos juntos». (…)
«La tragedia es que ni Bernardette ni yo hicimos nada mal», dice Chris. «Todo lo que queríamos era tener una familia normal, feliz».
Cualquier ruptura familiar es triste pero lo que hace este caso especialmente trágico es el hecho de que la pareja esta deseando tener niños.(…)
Los trillizos nacieron el 18 de agosto de 2005, de 31 semanas de gestación y pesando apenas 1330 gr cada uno. Casi inmediatamente las cosas empezaron a ir mal. El hígado de Brooke estaba creciendo fuera de su cuerpo y nada más nacer habría que operarla de urgencia.
Preocupados por su hija, Bernardette y los otros bebés no tuvieron la bienvenida que esperaban. Peor aún, el contrato de Chris había finalizado y tuvo que irse a trabajar fuera del país a las dos semanas del parto, volando a casa cada par de semanas.
“Nos dimos cuenta de que Bernardette no tendría tan fácil la vuelta al trabajo como si sólo tuviéramos un niño, así que decidí hacer todo el dinero que pudiera», dice Chris. «Visto ahora fue un terrible error. Echaba muchísimo de menos a los niños y puse a Bernardette bajo una gran presión ya desde el principio».
Bernardette se encontró a si misma corriendo entre su casa y el hospital. Tenía que pagar a una enfermera para cuidar de los otros dos mientras iba al hospital. Ninguno de mis amigos quería casi ni acariciar a mis bebés, mucho menos quedarse solo con ellos, les daba demasiado miedo.(…)
«Nunca tenía tiempo para comer. Estaba tan exhausta que me quedaba dormida regularmente en la bañera. Los bebés tenían que ser alimentados cada dos horas y las tomas parecían durar para siempre. A la una de la mañana me sacaba leche para que pudieran comer cuando yo no estuviera». (…)
«Empecé a estar siempre furiosa. Recuerdo una noche en la cama, con un bebé en cada pecho, pegándole puñetazos a la sábana con furia por todo lo que tardaban en comer. Les quería hasta el infinito, pero odiaba mi vida».(…)
«Me convertí en una máquina esterilizando biberones, alimentando a los niños y cambiando pañales. No había tregua. Pasé de ser una persona alegre a perder totalmente mi personalidad».
«Cuando Chris venía de visita estaba tan hecha polvo que simplemente le gruñía. Le envidiaba por poder salir de casa mientras yo estaba atrapada dentro volviéndome loca lentamente».(..)
«Nada era fácil. La hora de comer con tres bebés era una pesadilla. Había comida por todas partes, en el suelo y en las paredes. Mientras tratabas de darle comida a uno los otros dos estaban protestando».(…)
«Cuando los trillizos cumplieron un año decidimos irnos un fin de semana a Hungría. Estábamos ya en el avión y la tripulación nos mandó bajar. Nos dijeron que cada bebé debía estar con un adulto. Bernardette estaba entre lágrimas. Los trillizos empezaron a llorar. Estuvimos discutiendo durante media hora hasta que la tripulación se retractó, y sólo cuando un total desconocido nos ofreció ayuda con uno de los bebés». (…)
Cuando los trillizos cumplieron dos años los problemas se intensificaron. «Imagínate los terribles dos años por triplicado», dice Bernardette. «A un niño solo lo puedes controlar, pero a tres no».
«Chris y yo nunca nos culpamos el uno al otro. Después de todo, nos habíamos metido en esto juntos. Éramos como dos personas ahogándose. No podíamos salvarnos a nosotros mismos ni el uno al otro».
«El estrés trajo lo peor de nosotros mismos. Cuando admitimos que había problemas ya era tarde. No podíamos hablar entre nosotros sin discutir». (…)
Bernardette está segura. «Si sólo tuviéramos un bebé se que seguiríamos juntos», dice. «Cuando pienso en esa pareja feliz con estrellas en los ojos que esperaba trillizos se me empaña la vista.”
Fuente: I adore them but the brutal truth is that our triplets destroyed my marriage. Periódico Daily Mail UK.
¿Qué os han parecido estos testimonios? ¿Os sentís identificadas con lo que cuentan? ¿Creéis que tener múltiples une o desune la pareja? ¿De qué depende que ocurra una cosa u otra?
También te puede interesar
El tercer par de gemelos que salvó mi matrimonio
¿Quién es papá?
El padre de mis mellizos
El divorcio con gemelos, mellizos o trillizos
Cuidar trillizos sin ayuda, ¿Fin de la relación de pareja?
Pensando en separarme del padre de mis trillizas
Pasando una mala racha con el padre de mis mellizos de un año
Cuidar la pareja durante la crianza de gemelos, mellizos o trillizos
El padre y la abuela de mis gemelas me desautorizan
Gemelos, mellizos, trillizos y el síndrome del nido vacío
Ideas diferentes sobre la educación de nuestras gemelas
Categoría: Maternidad
Muy interesante. Creo que todo depende de la actitud de la pareja con la que afronta el nacimiento de múltiples desde antes de nacer. Preparación psicológica, poniéndose siempre en el peor de los casos. Mucha paciencia, compañerismo y empatía en la pareja.
Uffff estaríamos hablando largo y tendido….pero todo se arregla….te lo digo por propia experiencia…
Me gusta tu receta para un matrimonio saludable Andrea 🙂
El 90% de las discusiones con mi marido tienen que ver con desacuerdo en tema niños…
Yo creo que quizá no tanto se deba a tener múltiples… El nacimiento de un bebé también es causa de muchos divorcios, así que si el matrimonio va mal da igual, un bebé que dos o tres, eso sí cuantos más sean antes se divorciarán.
amorrr…. Farid E Mancera Gonzalez,,, checa esto!!!!
Ufff qué duro. La verdad es que el primer año -en nuestro caso- fue tenso y agotador. Pero mi pareja y yo hablábamos del tema y sabíamos que nuestras discusiones o desacuerdos se debían sobre todo al cansancio… Creo que es cuestión de afrontar los problemas que van surgiendo en familia, hablando, expresando nuestros sentimientos y diciéndonos lo que nos queremos, y que cualquier cosa podemos superarla así. No siempre es fácil, pero merece la pena intentarlo 🙂
Es fuerte la nota y los testimonios. Nadie nos da instrucciones de cómo ser padres y criar… Es agotador tener multipples; yo tengo a parte de mis mellizos de 9 meses una de 8 añosy uno de 4 años. Me he llegado a estresar, ahora ando con la espalda adolorida… es cierto que si con un bb descansas poco con multiples es casi nada… es el doble trabajo, o el triple… pero el cansancio fisico no debe estar ligado al mental (digo yo), siempre trato de admirarme y admirar… es duro, lo sé, pero el stres conlleva a mirar solo lo negativo… siempre me digo lo poitivo, tengo el apoyo de mi hija, mi peque y mi marido y eos que no tengo familia en España… mi madre y toda mi familia vive en Perú, no tengo suegra… pero mi esposo me ayuda mucho, a pesar de su trabajo…llega cansado de tr abajar pero hace la cena, los fines de semana yo no entro a la cocina… es mucho trabajo pero una experiencia que d ebe hacernos madurar como personas, madres y como pareja… ni nosotros lo pedimos ni ellos… no deberiamos ni culparnos ni culparlos
Una prueba de fuego sin lugar a dudas, pero también unen el doble, triple… 🙂
Sin palabras…!
Es muy estresante intentar educar a 2 niños a la vez (o mas) y pasar casi todo el dia sola con ellos porque la pareja tiene que traer un sueldo a casa necesario para vivir, la mayoria de discursiones vienen por diferentes puntos de vista en su crianza, es complicado aunque imagino que con un ssólo hijo también lo será porque aunque consigas reducir el nivel de estres los enfrentamoentos son inevitables
Es horrible, nosotros como primerizos de gemelas, hay momentos de verdadero extres, pero al final del dia lo hablamos y lo solucionamos, siempre mi mujer me pide un abrazo o un beso para animarla. Si por mi fuera me cambiaría por ella, eso lo sabe. Aun asi, cuando llego a casa, la ayudo en todo, incluso la mando a la cama a descansar, mientras yo doy bibes, cambio pañales, etc… yo creo que el amor, tanto por la pareja como por los hijos, hace la pareja fuerte, por mucho extres que alla… en un divorcio no se puede poner la escusa de los hijos, si os va mal, es algo vuestro, no de nadie mas.
Momentos durisimos, pero… No es cierto que al mirarles la carita se olvida todo ?
Interesante, pero estoy de acuerdo, la empatía, compañerismo y paciencia entre la pareja soluciona todo, yo tengo gemelos, y no me frustro para nada, aunque mi marido si me ayuda mucho, y ambos trabajamos… depende de cada relación, de como se lleven y si se ven en problemas que eso los fortifique, no que los separe..
Tengo 1 hija de 5 años y mellizas de 4 meses y mi marido y yo estamos mas enamorados que nunca. Paciencia y amor… es la receta. Si al nacer un bebe (o 2 o 3) la pareja si divorcia es porque algo ya no iba bien. Ahora soy mas feliz que nunca y amo a mi marido mas que nunca,
Yo estoy peor que ellos… No dejo de sentirme culpable por todo lo q m pasa, el papa de mis trillizos desde que se empezó a complicar el embarazo m dejó en casa d mi madre, cuando nacieron «no pudo ir al parto» yo tuve una hemorragia y los conocí después de 3 días fue duro, y sigue siendo duro, pase por la ucin sola porque él estaba ocupado siempre con el trabajo, cuando m los entregaron fuimos por ellos pero me dejo en casa de mi madre porque «era lo mejor», después nos fuimos a vivir juntos de nuevo, pero ahora con mi madre integrada y hermano pues necesitaba ayuda, luego m fue infiel con tan solo dos meses de nacidos, las cosas se fueron complicando tanto que decidí irme y separarme, luego vino la lucha contra todo mundo porque decidí meterlos a la guardería, pase y sigo pasando noches sin dormir Xq luego se enferman como cualquier niño pero multiplicado por 3, mi mama ayuda y mucho pero siento mucha frustración xq no puedo criarlos yo sola, y siempre tengo que depender d q alguien más «m haga el favor» de cuidarlos, a veces quiero poner las cosas de ellos como a mí m gusta, pero siempre q regreso a casa después de trabajar encuentro un yo lo cambie xq es mejor acá o allá, no lo regañes, no Les des eso, etc etc, su papa viene des vez en cuando, y duerme con nosotros, pero yo no dejo de sentir coraje x todo lo q ha pasado, a veces quisiera salir corriendo con ellos pero siento q el mundo se m cae, xq se q sola no podría, su papá está ausente de todos los momentos buenos, malos, enfermedades, desvelos, etc, no sé qué hacer y cómo salir de todo esto, la separación ya es lo de menos quiero vivir con mis hijos y poderlos educar como yo crea…